Cómo pintar puertas de madera

Cuando se busca renovar la imagen de una vivienda o negocio, es importante no descuidar el aspecto de las puertas. Hoy en día es muy fácil decorarlas gracias a la variedad de esmaltes y productos específicos que existen para ello. Sin embargo, pueden surgir dudas sobre cómo pintar las puertas de madera y qué procedimiento hay que seguir exactamente.

Cómo pintar una puerta de madera paso a paso


Para conseguir unas puertas nuevas no es necesario invertir mucho dinero: puede ser suficiente con volver a pintar las que ya tienes. No obstante, pintar las puertas no es fácil: es necesaria una cierta inversión de tiempo y esfuerzo para conseguir un resultado de calidad. A continuación te contamos cuál es el proceso para pintar una puerta paso a paso.

Dificultad
dificultad Media. Los distintos pasos para pintar una puerta de madera no son muy complejos, pero el proceso es muy laborioso.

Por otro lado, también hay que tener en cuenta que hace falta disponer de ciertos materiales y herramientas específicas para poder llevar a cabo este proyecto.

materiales y herramientas Materiales y herramientas para pintar una puerta
Brocha - Rodillo - Cubeta para pintura - Esmalte o pintura - Imprimación - Lijadora - Destornillador - Cinta de carrocero - Papel protector

Terminar cada puerta puede llevar varias horas y durante el proceso se corre el riesgo de estropear el suelo o las superficies de alrededor si no se protegen de forma adecuada. Por eso, si prefieres ir sobre seguro, puedes solicitar presupuestos de lacado de puertas a profesionales especializados.

Si dispones de tiempo libre y te apetece probar por tu cuenta, solo tienes que seguir leyendo para descubrir las instrucciones para pintar una puerta de madera.

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1. Protege la zona de trabajo

Cuanto mejor protejamos la zona, menos habrá que limpiar al acabar. Por eso es conveniente invertir cierto tiempo en preparar la estancia colocando papel protector en el suelo y cinta de carrocero en los bordes de la puerta y en aquellas zonas que se puedan manchar.
También puede ser necesario poner cinta de carrocero en la puerta: si tiene cristales, conviene protegerlos colocándola alrededor.

2. Prepara la puerta

Para trabajar con mayor comodidad es recomendable quitar la manilla y bisagras de la puerta. Puedes aprovechar para renovarlas y poner otras nuevas al acabar. Si decides reutilizarlas, guárdalas bien.

Si finalmente prefieres dejarlas, puedes intentar protegerlas con cinta de carrocero, pero es habitual que queden gotas de pintura o cercos si no se hace bien.
Por otra parte, si la puerta está barnizada, es conveniente lijar antes de pintar, aunque hay pinturas (como la pintura a la tiza o chalk paint) que se adhieren bastante bien sin necesida de lijar.
El lijado es un proceso algo complicado si no se ha hecho antes, ya que hay que evitar dañar la madera, y además genera bastante polvo y suciedad. Y ten en cuenta que, si está estropeada o tiene desperfectos, será necesario reparar la puerta.

En cualquier caso, hay que dejar la puerta completamente limpia antes de empezar a pintarla. Y muchas veces es necesario aplicar una imprimación para que la pintura se adhiera mejor, y hay que esperar a que se seque.

Aunque no es necesario, también puede ser conveniente desmontar la puerta por completo antes de trabajar sobre ella. Si la dejas montada, conviene calzarla para que no se mueva durante el proceso.
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3. Pinta la puerta y el marco

Antes de nada, debes elegir bien el esmalte o la pintura que vayas a utilizar. Por ejemplo, hay que tener en cuenta los colores: si el color de la pintura es más claro que la puerta, probablemente requiera más trabajo y más capas llegar a la tonalidad deseada.

También es importante calcular bien la cantidad de pintura necesaria, ya que si nos quedamos cortos y es necesario comprar más pintura, el tono puede ser ligeramente distinto.

Una vez tengas clara la elección de la pintura, bastará con que la apliques con las herramientas adecuadas.
Conviene utilizar distintas herramientas para conseguir acabados perfectos. Por ejemplo, la brocha es mejor para hacer los recortes y pintar superficies pequeñas (como podrían ser las molduras), mientras que en otros casos, como al pintar las superficies planas, conviene más utilizar un rodillo.

Si quieres conseguir un acabado verdaderamente uniforme, puedes utilizar una pistola de pintura.
Después es muy importante respetar los tiempos de secado antes de darle una segunda mano de pintura a la puerta. Normalmente se recomienda que las distintas manos o capas sean más bien finas, para poder ir cubriéndolas con nuevas capas si el resultado no es el esperado.

Para pintar el marco de la puerta hay que proceder de igual forma, tras haber retirado las bisagras y haber colocado la cinta de carrocero.


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Instrucciones para pintar una puerta


4. Vuelve a dejarlo todo como estaba

Puede que haga falta hacer algunos retoques, pero por norma general el último paso consiste en volver a colocar la maneta y limpiar los restos de pintura que hayan podido quedar alrededor de la puerta.

Ten en cuenta que si se ha creado alguna unión entre la pintura de la puerta y la cinta de carrocero, antes de retirar la cinta hay que cortar la unión para no arrastrar el esmalte detrás.

¿Cuánto cuesta contratar a un pintor para lacar las puertas?


Como has podido comprobar, pintar una puerta es un proceso bastante laborioso al que hay que dedicarle mucho tiempo. Si no lo terminas de ver claro, es posible que te estés preguntando cuánto cuesta pintar o lacar una puerta contratando a un profesional.
El lacado de puertas suele costar entre 80 € y cerca de 300 € por puerta, dependiendo de las circunstancias. Pero muchos profesionales ofrecen servicios de pintura de puertas más económicos, entre 30 € y 100 € por puerta.
Por otra parte, además de las variaciones que puede sufrir el presupuesto en función del tipo de servicio solicitado, hay que tener en cuenta la zona geográfica. Y es que puede haber diferencias entre solicitar un presupuesto de lacado de puertas en Barcelona y solicitarlo en Alicante, en Sevilla o en cualquier otro lugar.

Al final la mejor forma de salir de dudas sobre el precio del lacado o la pintura de puertas, es solicitar presupuestos a profesionales especializados.

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