Si deseas convertirte en masajista profesional y ofrecer los masajes a domicilio en lugar de en un centro de masajes, te contamos cómo puedes hacerlo.
No hay lugar a dudas que este tipo de negocio requiere de menor inversión y es más, cada vez son más los clientes que solicitan este tipo de alternativa por mayor comodidad y para evitar desplazamientos.

A continuación te ofrecemos una serie de consejos para ayudarte en esta tarea.
Seguro que todo el mundo ha dado algún masaje a algún familiar, amigo o pareja en la intimidad del hogar. Estos pueden resolver momentáneamente alguna dolencia, pero si se hacen sin conocimiento pueden causar peores contracturas.
Para poder ser masajista a domicilio es necesario que tengas estudios relacionados con este ámbito. Así podrás realizar masajes con pleno conocimiento, y tus clientes quedarán mucho más tranquilos y satisfechos al saber que se han puesto en las manos de un masajista profesional.
Tal vez te preguntes cómo ser masajista. En relación con esto debes saber que no hay ningún título de masajista reconocido por el Ministerio de Educación. Sin embargo, sí que existen escuelas, academias y formación online para ser masajista.
Por ejemplo, puedes encontrar formación específica de masajes, así como cursos sobre masajes descontracturantes, relajantes, thai, etc., reflexología de manos y pies, digitopuntura, y otras especializaciones en terapias naturales.
Después de finalizar tus estudios, has de darte de alta en el régimen especial de trabajadores autónomos de la Seguridad Social como terapeuta manual presentando el modelo oficial de solicitud de alta TA0521 e indicar el epígrafe 8690 de otras actividades sanitarias que comprenden actividades como quiropráctica, acupuntura, etc., entre otros documentos.
Además, también necesitas el alta fiscal y para ello presentar el alta censal (modelos 036 y 037), Impuesto de Actividades Económicas IAE (modelo 845) y los epígrafes de actividad 839 para masajistas y 841 para el caso de naturópatas, acupuntores y otros profesionales sanitarios. Si consideras que te vendría muchísimo mejor ayuda profesional con todos estos trámites, no dudes en solicitar asesoramiento profesional en Cronoshare.
Tienes que contar con buenos materiales. Seguramente tendrás que hacer una inversión inicial, pero la recuperarás en cuanto tu negocio comience a despuntar. Compra todos los aceites y esencias que necesites, así como camillas, toallas y otros complementos para los masajes. Esto da una sensación de profesionalidad y buena imagen de cara a tus clientes.
Una vez has adquirido todo el material necesario, tienes que pensar qué necesita cada cliente. Diferentes trabajos requerirán diferentes materiales, por lo que no será necesario que cargues con todo en cada cita.
Así solo conseguirás perder tiempo y llegar más cansado/a a tu trabajo, dando una imagen de poca profesionalidad.
Eres tu propio jefe, así que puedes establecer tus propios precios. Empieza calculando todos tus gastos (materiales, desplazamientos, tarjetas de visita...) y a raíz del resultado deduce cuánto podrías cobrar por tu servicio de masajes. Como ayuda puedes consultar los precios establecidos por tus competidores.
Parece algo obvio, pero es básico cuidar la imagen. Haz uso de ropa y calzado limpio, así como mantén una higiene y desinfección adecuada en la camilla y prendas que se necesiten usar (toallas, por ejemplo).
Bueno, esto es algo que cualquier persona valora. Debes ser puntual tanto al comenzar como al finalizar el servicio.
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No hay lugar a dudas que este tipo de negocio requiere de menor inversión y es más, cada vez son más los clientes que solicitan este tipo de alternativa por mayor comodidad y para evitar desplazamientos.
Índice

Pasos para ser masajista a domicilio
A continuación te ofrecemos una serie de consejos para ayudarte en esta tarea.
Formación y titulación
Seguro que todo el mundo ha dado algún masaje a algún familiar, amigo o pareja en la intimidad del hogar. Estos pueden resolver momentáneamente alguna dolencia, pero si se hacen sin conocimiento pueden causar peores contracturas.
Para poder ser masajista a domicilio es necesario que tengas estudios relacionados con este ámbito. Así podrás realizar masajes con pleno conocimiento, y tus clientes quedarán mucho más tranquilos y satisfechos al saber que se han puesto en las manos de un masajista profesional.
Tal vez te preguntes cómo ser masajista. En relación con esto debes saber que no hay ningún título de masajista reconocido por el Ministerio de Educación. Sin embargo, sí que existen escuelas, academias y formación online para ser masajista.
Por ejemplo, puedes encontrar formación específica de masajes, así como cursos sobre masajes descontracturantes, relajantes, thai, etc., reflexología de manos y pies, digitopuntura, y otras especializaciones en terapias naturales.
Trámites
Después de finalizar tus estudios, has de darte de alta en el régimen especial de trabajadores autónomos de la Seguridad Social como terapeuta manual presentando el modelo oficial de solicitud de alta TA0521 e indicar el epígrafe 8690 de otras actividades sanitarias que comprenden actividades como quiropráctica, acupuntura, etc., entre otros documentos.
Además, también necesitas el alta fiscal y para ello presentar el alta censal (modelos 036 y 037), Impuesto de Actividades Económicas IAE (modelo 845) y los epígrafes de actividad 839 para masajistas y 841 para el caso de naturópatas, acupuntores y otros profesionales sanitarios. Si consideras que te vendría muchísimo mejor ayuda profesional con todos estos trámites, no dudes en solicitar asesoramiento profesional en Cronoshare.
Consigue buenos materiales y no cargues con todo el material
Tienes que contar con buenos materiales. Seguramente tendrás que hacer una inversión inicial, pero la recuperarás en cuanto tu negocio comience a despuntar. Compra todos los aceites y esencias que necesites, así como camillas, toallas y otros complementos para los masajes. Esto da una sensación de profesionalidad y buena imagen de cara a tus clientes.
Una vez has adquirido todo el material necesario, tienes que pensar qué necesita cada cliente. Diferentes trabajos requerirán diferentes materiales, por lo que no será necesario que cargues con todo en cada cita.
Así solo conseguirás perder tiempo y llegar más cansado/a a tu trabajo, dando una imagen de poca profesionalidad.
Elabora tus presupuestos
Eres tu propio jefe, así que puedes establecer tus propios precios. Empieza calculando todos tus gastos (materiales, desplazamientos, tarjetas de visita...) y a raíz del resultado deduce cuánto podrías cobrar por tu servicio de masajes. Como ayuda puedes consultar los precios establecidos por tus competidores.
Recuerda que un precio demasiado bajo te restará credibilidad ante tus clientes, pero uno demasiado alto los puede ahuyentar.
Cuida tu apariencia
Parece algo obvio, pero es básico cuidar la imagen. Haz uso de ropa y calzado limpio, así como mantén una higiene y desinfección adecuada en la camilla y prendas que se necesiten usar (toallas, por ejemplo).
Puntualidad
Bueno, esto es algo que cualquier persona valora. Debes ser puntual tanto al comenzar como al finalizar el servicio.
Y ahora que has decidido ofrecer tus servicios de masaje a domicilio, te interesará saber Cómo Captar Clientes como Masajista a Domicilio. Te lo contamos en ese artículo.
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